Es curioso como las personas somos luz y oscuridad a la vez; luz en los otros y oscuridad en nosotros, rota oscuridad con los reflejos ajenos que nos llenan de luz hasta hacerlos nuestros, así ya no brillamos en los que no están, pero ellos no dejarán de brillar en nosotros.
Precisamente el día que colgaste este post perdí yo a una persona muy especial. La gente que lo conocimos, en un montón de sitios en España, quedamos en encender una vela y meditar sobre la vida de esta persona. Me sentí muy reconfortado.
Es curioso como las personas somos luz y oscuridad a la vez; luz en los otros y oscuridad en nosotros, rota oscuridad con los reflejos ajenos que nos llenan de luz hasta hacerlos nuestros, así ya no brillamos en los que no están, pero ellos no dejarán de brillar en nosotros.
ResponderEliminarPrecisamente el día que colgaste este post perdí yo a una persona muy especial. La gente que lo conocimos, en un montón de sitios en España, quedamos en encender una vela y meditar sobre la vida de esta persona. Me sentí muy reconfortado.
ResponderEliminarTb para los que no tuvieron que haber ido, sobre todo de aquella forma
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