Kitchen

Cuando se le muere la abuela, la jovencísima Mikage queda absolutamente sola en una casa demasiado grande y se refugia en la cocina, pues sólo en ella se siente a salvo («El lugar donde mejor se duerme es en la nevera», confiesa). Pero un día  «ocurre un milagro» : Yuichi, «un chico simpático», llama a la puerta de Mikage y le sugiere que vaya a vivir a su casa, con su madre Eriko. Pero esta hermosa y acogedora mujer no es una mujer : es un hombre que pasó a ser mujer cuando la verdadera madre de Yuichi perdió la vida. 

Esta fábula, que se desarrolla entre ordenadores, electrodomésticos y sobre todo alimentos y guisos, pero también entre sentimientos de amor, amistad y complicidad, es en realidad una historia terrible, en que la soledad y la aridez emocional quedan, como por «milagro», mitigados por la inmensa sabiduría de otro mundo ancestral, afortunadamente aún latente, aún perceptible.

Es el segundo libro que leo de Yoshimoto después de "Tsugumi" y me ha vuelto a encantar su manera de narrar la historia.

Cuando pierdes a tu familia, aunque sea una sola persona, una parte de ti se siente perdida y desorientada, buscas refugio allí donde te sientes más cómoda o donde has pasado buenos momentos en su compañía. En el caso de Mikage su refugio es la cocina y es allí el único sitio donde, después de la muerte de su abuela, se siente a salvo.

Yuichi la convence para se traslade a su casa a completar su particular familia y sólo cuando descubre su cocina se siente con fuerzas para hacerlo.

Una bella fábula sobre la amistad, el amor en cualquiera de sus vertientes y una clara afirmación que aunque nada parezca lo que es siempre tienes que aceptar las cosas como viene y aprender a convivir con ello.

Además esta edición trae de regalo un cuento muy corto, precioso, sobre el amor más allá de la muerte.

Una delicia para los sentidos que se lee en un suspiro y se queda largo tiempo en la memoria.