The visitor

En un mundo de seis mil millones de personas, sólo necesitas una para que te cambie la vida.

Walter Vale (Richard Jenkins), de sesenta y dos años, camina como sonámbulo por su propia vida. Perdida su pasión por enseñar y escribir, llena su vacío existencial intentando infructuosamente aprender a tocar el piano clásico. Cuando su universidad le envía a Manhattan para asistir a una conferencia, Walter queda sorprendido al descubrir que una joven pareja se ha instalado en su apartamento. Víctimas de una estafa inmobiliaria, Tarek, de nacionalidad siria, y Zainab, su novia senegalesa, no tienen adónde ir. En la primera de una serie de pruebas para su corazón, Walter permite de mala gana que la pareja se quede con él.

Una película llena de sonido, de color, de amistad. Un hombre que no sabe que hacer con su vida mas que seguir fingiendo se encuentra que su casa está "ocupada" por una pareja engañada. Su primera intención de dejarlos que se busquen la vida se convierte en una convivencia algo tensa los primeros días para convertirse en "amistad" con el paso de las semanas. ¿podemos aprender de los demás? está claro que si y esta película lo intenta demostrar. Además hay un transfondo más político sobre la función del estado con los ilegales que pueblan las ciudades estadounidenses, la impotencia de personas con una vida ya hecha y asentada que son detenidos por alguna pequeña falta y pagan lo que algunos degenerados nunca debieron hacer, cuando vinieron a ese país lo hicieron buscando un futuro mejor y se van dejando su sueño muchas veces al alcance de sus manos.