Tan cerca del aire

Jonás es un adolescente que queda huérfano tras la muerte de su padre, el único familiar directo con el que tenía contacto. Tras esta catástrofe personal, Jonás decide quedarse en la casa familiar, solo y haciéndose cargo del trabajo de su padre: cartero del pequeño pueblo en el que vivían. De esta forma, el joven entra en contacto con doña Paula, una señora a la que apenas conoce pero que le descubre que tiene fuertes vínculos con su familia y con él mismo.

Doña Paula aprovecha cada visita de Jonás en el reparto del correo para ir desgranando poco a poco la verdadera historia de su familia. Una historia imposible e increíble, llena de milagros y tragedias, pero que para Jonás tiene pleno sentido.Es tal el impacto que provoca en Jonás el conocimiento sobre quién era su madre y sus auténticos orígenes que decide marcharse lejos para olvidar. Pero hay ciertas cosas de las que uno no puede huir y Jonás termina regresando a la casa paterna y aceptando que su vínculo con las garzas que año tras año visitan el pueblo va más mucho más allá que la simple admiración de su belleza. Desde ese momento, su vida ya nunca será convencional; aceptado el milagro su existencia se transformará de manera definitiva y sin marcha atrás.

Gustavo Martín Garzo presume en sus libros de un lenguaje poético y fantástico, de dar un toque de realidad mágico a todo lo que sale de sus manos. Si tengo que guiarme por esta lectura yo opino que esta definición es demasiado vanagloriosa.

El texto es demasiado largo, el lector es tratado de tonto integral muchas veces cuando se pasa más de diez páginas describiendo lo que le interesa con detalle sin pensar en que ya se entiende con una sola frase. Demasiado fantasioso para mi, demasiado poético, demasiado poco creíble, con un lenguaje flojo y poco variado, demasiado lleno de comparaciones de belleza que no hacen que el texto se haga más bello sino más bien al contrario...

No entiendo como se dan los premios en este país, bueno, sí lo sé pero no creo que sea la mejor manera...