El rayo dormido (LE#21)

Natalia Soler es una periodista que siempre ha querido escribir y que, tras quedarse en paro, se presenta a una beca de investigación con un proyecto sobre dos vecinos de la misma localidad que vivieron la guerra desde bandos enfrentados. Uno de ellos, José Emilio, era cura y fue asesinado durante la contienda. El segundo, Antonio Almenar, fue un activo luchador contra el fascismo, y formó parte de la Nueve, la mítica compañía formada por republicanos españoles que liberó París de los alemanes, y cuya gesta cayó en el olvido histórico.

Al tiempo que recoge testimonios para elaborar su libro, Natalia recibe un mensaje del pasado a través de Facebook. Carmen, una vieja amiga que desapareció de su vida sin previo aviso, quiere quedar con ella, lo que despertará en Natalia el recuerdo de algo que quedó sin esclarecer y que demuestra que una chispa sin consecuencias aparentes puede desencadenar un incendio imprevisible muchos años después…

Dos mujeres y dos partes de un viejo relato que nunca acabó de contarse, poblado con personajes históricos y anónimos de nuestra historia reciente, vencedores y vencidos, cincelados con sabiduría y compasión, con las luces y las sombras de la vida misma.

Segunda novela que leo, tras "El tiempo mientras tanto", de esta autora. 

Dicen que lo difícil no es llegar sino mantenerse y cuando una autor/a deja el listón alto en una primera obra se espera con ansia una segunda y se desea que mantenga el mismo nivel o similar a lo anterior. Para mi esta novela es muy inferior a la primera que leí (no ha sido la única vez que me ha pasado en los últimos libros), con ello no quiero decir que esté mal escrita o que no se pueda leer.

Seguramente habrá gente que estará encantada con ella, que le gustará incluso más que la primera y que no entenderá la crítica pero para mi no ha sido así.

Un argumento bastante cogido con pinzas sobretodo la trama de la amiga reencontrada por facebook, la parte de la historia antigua sobre la que investigar está algo mejor pero tampoco me ha acabado de convencer.

Una lástima para una autora con la que había disfrutado leyendo sus palabras.