Brno, años cincuenta. En pleno terror estalinista, una joven pintora es asesinada tras un interrogatorio de la policía secreta. Su hermano, un arquitecto especializado en diseñar edificios de mal gusto para los gerifaltes comunistas, jura venganza.
Un día, por casualidad, descubre un sótano abovedado situado justo debajo de su edificio, en el centro de Brno, y es entonces, tras recordar un relato de Nabokov, a quien conoció en su infancia, cuando se propone encerrar allí al responsable de la muerte de su hermana.
No obstante, su particular campaña de venganza privada se le va de las manos y las consecuencias se vuelven imprevisibles.
Con esta historia de crímenes con trasfondo político, Kratochvil, considerado el escritor checo más importante de la era post-Kundera, crea una parábola laberíntica cargada de un humor negro de altísima graduación.
Fue una de mis compras para Sant Jordi, esta editorial nunca me había defraudado y aunque no había oído críticas ni tenía referencias decidí arriesgarme. Ahora sé que me equivoqué.
Después de haberla terminado he visto que comparan la prosa con Nabokov y con Dürrenmatt. He leído libros de estos dos autores y para mi gusto no se le parece en nada.
En todas las descripciones se hace referencia a que es una novela negra, aunque yo creo que la negrura la da su humor y el que la mayoría de su argumento se desarrolla bajo tierra. Si, hay un oficial de policía y un detective, una pseudo investigación por la desaparición del primero y una búsqueda de la hermana del protagonista; por lo demás pocos tintes de novela negra le veo.
Un arquitecto muy codiciado durante la época nazi ve como su esplendor está mermado cuando el terror estalinista y su revolución comunista llegan a la ciudad y al país. Asistimos a su degradación como artista y sus dificultades para sobrevivir. Además su hermana, artista poco convencional, es detenida por acciones subversivas y hallada muerta en circunstancias poco claras en su celda. Este es el caldo de cultivo que lleva a nuestro arquitecto a construir un mundo paralelo, subterráneo en el que las reglas del juego son distintas y lo que en principio estaba pensado para albergar una sola persona, el oficial responsable de la muerte de su hermana, se convierte en la reivindicación de su trabajo.
Paranoico, sin mucho orden en la historia, a veces sin saber de quién está hablando el escritor, una historia a la que no le he visto demasiado el orden y el concierto y que me ha costado leer mucho más de lo que me esperaba.
Quizás sea sólo yo la equivocada y esta sea una novela imprescindible con el paso del tiempo pero a mi no me ha gustado y por tanto no puedo recomendarla.
Ya es raro encontrar una reseña de un libro de la editorial Impedimenta que no sea para alabarlo ;) De este libro he visto alguna opinión (pocas) y la verdad que bastante opuestas: desde grandes elogios a, como tú, opiniones negativas. Por lo que he visto (que el libro no lo he leído) parece que el estilo del autor es bastante caricaturesco y tendente al absurdo.
ResponderEliminarLo tenía anotado, pero creo que lo dejaré en el limbo de momento, sin descartarlo del todo.
Un saludo!
La verdad es que el argumento no me atrae mucho. Me parece que en esta ocasión, a pesar de ser de esta editorial, lo voy a dejar pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!
Ya que nombras a Dürrenmatt recomiendo "El juez y su verdugo", y también otra de sus novelas, esta ya no es del género policíaco, "Griego busca griega"
ResponderEliminarUn abrazo