El pozo de la soledad


Stephen Gordon (bautizada así, con nombre masculino por un padre que quería desesperadamente un hijo) no es como las otras muchachas: le gusta la caza, el esgrima, la lectura, se pone pantalones y quiere llevar el pelo corto. Mientras crece entre la asfixiante grandeza de Morton Hall, la gente del pueblo mantiene sus distancias, ya que peciben en ella algo indefinible que la hace diferente. Y cuando Stephen Gordon alcanza la madurez, se enamora apasionadamente de otra mujer [Stephen se ha convertido en todo un arquetipo de lesbiana cuya trayectoria vital y emocional la lleva a afirmarse como mujer y como individuo contra la mediocridad de su entorno].
Una novela llena de fuerza que habla del amor entre mujeres. El pozo de la soledad dio lugar al juicio más famoso por obscenidad de la hitoria legal inglesa. Prohibida desde su publicación en 1928, pasó a convertirse en todo un clásico y un éxito de ventas.
Nos encontramos delante de un libro de amor, con todo lo que ello implica, pero no pasteloso, es mucho más que eso... es la vida de una niña, de una jovencita, de una mujer en la Inglaterra de los años viente... alguien que se siente distinta de los demás y no sabe porque, que no le gusta sentarse y coser ya que prefiere cazar, que ve con unos ojos distintos a la ama de llaves, una niña que debió ser niño y nació condenada. Una jovencita enamorada de la persona equivocada, de la persona que sólo juega con ella y sus sentimientos, que le hace daño por primera vez, con nombre y apellidos ya, que le hace descubrir que es indigna para su madre, que antes muerta que como es ella. Un exilio forzado para encontrar su sitio en el mundo, su fiel aliada, también en silencio, la acompaña y en ella se apoya cuando se siente libre, sin ataduras. Luego viene la guerra que todo lo trastoca, que todo lo cambia, donde las mujeres como ella por fin tienen un sitio, se sienten por fin útiles y allí conoce de nuevo el AMOR, esta vez en mayúsculas, correspondido...
-Toda mi vida he estado esperando algo.
-¿qué esperabas, querida mía?
-Te esperaba a ti, y la espera se me ha hecho muy larga...(pág 364)
Luchar por ser aceptada como es, por como son, una lucha donde el dinero poco ayuda y se topa con el rechazo de la inmensa mayoría. Saber que sólo se siente libre entre gente como ella, en un ghetto pero libre al fin.
Los sentimientos, dudas, miedos, debilidades son iguales que los que podemos sentir cuando  en la actualidad delante del enamoramiento, poco importa que se escribiera el siglo pasado.
-Nos sentimos repletas de la antigua paz de Morton, porque nos queremos tanto tú y yo... que formamos un ser perfecto... no somos dos personas distintas sino un solo ser. Y nuestro amor es como una antorcha encendida que extingue nuestro miedo a la oscuridad... nuestro amor tan cálido... nuestro amor tan intenso.. nos tendremos juntas y te rodearé con mis brazos (pág. 189)

3 comentarios :

  1. No conocía este libro.
    Seguro lo compraré y ya veremos.
    Thanks.

    ResponderEliminar
  2. Mmmmmmm... Apuntadooo!

    ResponderEliminar
  3. Se me hace la boca agua con este libro...
    sé que em encnataria leerlo..
    de echo lo buscaré...
    gracias por darmelo aconocer des...

    un beso enorme..

    ResponderEliminar

 
Copyright 2013 Dsdmona .